Hoy mirando algunas fotos en casa, encontré una que me hizo rememorar algunos buenos momentos, de esos que cuando vuelven a ti, te arrancan una de tus mejores sonrisas.A Nando lo conocí, hace una vida, no podría decir la cantidad de años que nos conocemos, porque ya perdí la cuenta y porque son muchos (y ademas porque si empiezo a contarlos, talvez llegué a la conclusión que empiezo a crecer y no se si quiera saber cuanto). Nuestros caminos se cruzaron gracias a la música y el arte y a partir de ese momento el destino nos condujo a ambos a descubrir juntos una vida llena de aventuras, de experiencias colosales, donde mas de una vez hubo, lo que la amistad te lleva a descubrir y lo que los amigos de toda una vida comparten, complicidad incondicional!!!
Los años maravillosos (se acuerdan de esta serie en la tele?) pues nosotros hubiéramos podido crear una saga completa de "días maravillosos y aventurosos" (aunque esta palabra no existe en el diccionario no importa, igual me la invento hoy), porque aventuras es lo que menos faltaba a nuestras vidas. Ambos testarudos empedernidos, ambos ávidos de inventar mundos, siempre creando, no importaba que, había que crear o inventarnos aventuras, porque si no, la vida sola no era suficientemente divertida, aun teniendo que ir 8 horas de nuestro día a trabajar, aun nos quedaba otras 8 para divagar y aventurar, entonces había que aprovechar (y si que lo hacíamos).
Ahora que lo pienso, no se como hacíamos, no se de donde nos salia el tiempo para aventurar y de donde tomábamos el tiempo ademas, no solo para embarcarnos en cada aventura, si no también que lo utilizábamos para descubrir, para romancear (porque ambos nos damos tiempo para romancear también), y por supuesto para tomar el té y educar a nuestro paladar, para visitar nuestro café predilecto "El Anuska" y tomar nuestro ponche de vino caliente y discutir de todo y nada.
Y para hablar de filosofía y filosofar, ejercicio que repetíamos, cada día y por el que ha decir verdad, yo no tenia ninguna habilidad y sin embargo para él era como pan comido (como dicen en nuestro pueblo). Y ahora que lo pienso, me acuerdo de las muchas veces que se molestaba conmigo porque no había probablemente comprendido la esencia máxima de lo que me explicaba y al final terminábamos o peleando o riendo de mis ineptitudes .
Para ver películas, sin lugar a dudas uno de nuestros mas preciados momentos, puro placer, sentarse a ver los clásicos como "Casa Blanca" y ademas por supuesto de otras buenas películas como "Los puentes de Madison" por ejemplo, una de nuestras preferidas (*).
Recuerdo que esta película la vimos unas cuantas veces, para muchos podría ser aburrido, pero para nosotros era nuestro mejor pasatiempo. Y luego de verla tantas veces, pues venia lo mejor, la discusión de horas y horas, porque lo interesante de esta aventura de era justamente lo que venia después, horas y horas de placer, aventurándose a ser críticos de cinema porque no, todo era posible.
Y otras tantas veces que nos dábamos tiempo para simplemente discutir de todo y nada, simple y llanamente por el placer de encontrarle los tres pies al gato y porque la amistad se construye a través de justamente estas horas maravillosas de compartir, de discutir de todo y nada y por supuesto de reír también, porque eso si hicimos mucho, reír.
En fin, cada momento compartido fue intenso, como es la verdadera amistad, de esas que construyes a traves de los años y a través del día a día, esas con la que cuentas en tus peores momentos, esa amistad que te permite vivir momentos privilegiados, momentos de alegría y de tristeza, de esos momentos en los que aun cuando sabes que el corazón se te parte, tienes que decir adiós y ser cómplice una vez mas en nombre de la amistad.
Esta amistad me enseño y me dio mucho, y me hizo comprender que a estas alturas de la vida, no importa mas, donde o a que distancia estemos separados, la complicidad sera eterna, Nando y yo seremos siempre amigos e incondicionales y eso no cambiara ni el tiempo ni la distancia y si hay algo de lo que estoy segura 100% es de eso.
Hoy quise dedicar este momento a la amistad, y decirte gracias a ti, mi gran amigo y mi gran cómplice, gracias por ser parte de mi vida y haber hecho de muchos de mis días, unos maravillosos y aventurosos!
Y a ustedes amigos!
No olviden que los amigos, no importa el lugar donde se encuentren, ni la distancia que los separe, siempre estará ahí, que la verdadera amistad es a prueba de todo y eso se los puedo asegurar, así que no se olviden de ellos y díganles cuan importantes son en vuestras vidas, verán cuan bien le hará. Palabra de Lala!!!!
Buena semana y aprovechen con los amigos!!!!
(*) Aqui les dejo un líen para que vean un resumen de Los puentes de Madison. Que lo disfruten!
http://www.youtube.com/watch?v=sxNBu8LSPME&feature=related
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